Obras maestras que no se discuten #47



The Minutemen
"Double Nickels On The Dime"
(SST, 1984)

Hace poco leí que D. Boon aparecía en la lista de los 100 mejores guitarristas de la historia según Rolling Stone (qué cosas, no?) y me he puesto a pensar por millonésima vez en lo terriblemente buenos que eran los Minutemen. Y carismáticos. E innovadores. Y graciosos. E ingeniosos. Y personales. Qué buenos que eran, en fin. Podríamos hablar de cualquiera de sus discos o incluso del grupo que Mike Watt y George Hurley montaron unos años después, fIREHOSE, pero vamos a hablar de su Magnus Opus: "Double Nickels On The Dime" (SST, 1984). Ésta es la clase de disco que puede marcar tu vida. Un chaval de dieciseis tacos desenfundará este disco algún día en algún lugar y observará los extraños dibujos de Raymond Pettibon mientras suena "Political Song for Michael Jackson to Sing". Y el Mal ya estará hecho. Seguramente dirá "Esto qué cojones es?", pero no quitará el disco. Lo seguirá escuchando y se lo dirá a sus colegas más enrolletis, etc etc

Es conocido el hecho de que "Double Nickels On The Dime" fue creado como reacción a "Zen Arcade", de Hüsker Dü. El grupo había grabado un elepé de duración normal a finales de 1983, justo cuando el apabullante doble LP de los Hüskers fue publicado. Entonces decidieron componer unas cuantas canciones más y en Abril del 84 entraban a grabarlas para la eternidad. Watt escribió las famosas palabras "Take that, Hüskers!" en las notas del disco, pero por lo que parece no lo hizo en plan competición sino como agradecimiento por la sugerencia de grabar un doble LP que Bob Mould le hizo. A diferencia de "Zen Arcade", el doble de los Minutemen no es un álbum conceptual, aunque se puede decir que va sobre coches (cada cara se abre y se cierra con el sonido de un motor en marcha). El tercer disco de los Minutemen acabó conteniendo la bonita cifra de 43 canciones, que fueron organizadas de una manera bastante simpática: cada miembro se adjudicó una de las caras del disco y la cuarta cara ("Side Chaff") sería para los temas sobrantes. Hicieron un sorteo y la primera cara le tocó a Hurley, que eligió sus canciones. La segunda fue para Boon (mi favorita) y la tercera para Watt. Se ve que esto es un homenaje a "Ummagumma" de Pink Floyd, pero no os lo puedo confirmar porque Pink Floyd nunca me han importado un cagarro. Minutemen eran un grupo que bebía de las fuentes clásicas (Creedence, Grand Funk, Van Halen) que un buen dia descubrió que en realidad no hacía falta tener un gran sello detrás ni ser muy guapo para hacer tus propias canciones. El grupo que les demostró que esto era posible fue Black Flag, uno de los verdaderos pioneros de la música independiente americana, que influenció a un nivel ético a miles y miles de personas que montarían sus propios grupos, escribirían sus fanzines, organizarían conciertos en el sótano de la casa de sus padres, etc..

Por otro lado, The Minutemen me caen especialmente simpáticos por su origen genuinamente working class. D Boon y Mike Watt no eran hijos de funcionarios del gobierno como la mayoría de la escena de Washington DC, sinó que provenían de un pueblo pescador de California totalmente carente de glamour como San Pedro. Con el tiempo Minutemen desarrollaron una filosofía de vida que estaba en perfecta consonancia con sus orígenes proletarios y que nada tenía que ver con los grupos que les inspiraron musicalmente.

Y aparte están las Canciones, verdaderos Himnos como "This Ain´t No Picnic", "Corona", "Political Song for Michael Jackson To Sing" o "Spillage". Hasta entonces el grupo había desarrollado un estilo característico, una suerte de post punk/funk inspirado en Gang of Four marcado por dos elementos predominantes: la guitarra rebosante de treble de D Boon por un lado y las dinámicas líneas de bajo de Mike Watt por el otro. Pero en "Double Nickels.." el grupo fue un poco más allá, ofreciendo canciones que se adaptaban perfectamente a lo que la gente esperaba del grupo combinadas con otras que no tenían absolutamente nada que ver: "Do You Want New Wave Or Do You Want The Truth?" y "Take 5, D.", por ejemplo, son una combinación de spoken word y jazz al puro estilo Greenwich Village de finales de los 60. Lo que está claro es que el eclecticismo que demuestra el grupo en estas 43 canciones se aparta radicalmente del canon dominante en la escena punk hardcore de la época. Un doble disco totalmente ecléctico que además no escondía un posicionamiento político que se echa muchísimo de menos en las bandas independientes de hoy en día.

Nickels